El dato lo está difundiendo la Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos de España, «tras analizar los datos publicados en el FEGA, la Comisión y contrastar con sus territorios».

La oganización explica que «la producción de uva habría disminuido un 6%. En comunidades autónomas vitivinícolas como Castilla La Mancha el descenso es del 5.1%, dato especialmente importante, al concentrar el 50% de la producción española».

Y agrega que «por el contrario, se destaca el dato de Castilla y León, cuya producción habría aumentado en un 17%. Según miembros de la organización esto se ha debido a la mayor estabilidad en las condiciones climatológicas y a la buena salud de los cultivos».

vendimia-espana

Respecto del mercado mundial, que la organización define como «de menor oferta en términos globales», comenta que «Francia, habría disminuido un 6% en total, e Italia, esta última habría incrementado su producción en un 4%».

“La vendimia en los países del cono sur – Argentina y Chile – ha sido baja, en el caso de Argentina la previsión alcanza descensos del 30%, la más baja en los últimos 50 años y Chile ha registrado un descenso en esta cosecha de hasta el 30%», apunta.

Por todo esto, «y si el resto de los países europeos también registran menores cosechas en conjunto, la previsión de cara a la campaña de comercialización tiene que ser optimista”, afirman desde Unión de Uniones.

La organización confía en que los precios de la uva deben aumentar, dada la buena calidad de la uva, y considera que los precios del vino deben registrar subas en los distintos mercados, tanto en origen como en destino.

“Somos uno de los grandes países productores por lo que, creemos, que esta excelencia debe trasladarse al viticultor y al vinicultor. También esperamos que nosotros sepamos ponerlo en valor en el momento de poner la uva y el vino en el mercado”, afirman.

Y en ese sentido, advierten que «la debilidad de los datos estadísticos que provocaron una propuesta inusualmente baja de los precios de la uva en los comienzos de la campaña y el agravio comparativo que supone no disponer de datos estadísticos fiables que eviten esa tendencia a mantener dichos precios en esos niveles».

“De nuevo los servicios de prospectiva del Ministerio de Agricultura en Francia, constituyen un ejemplo a seguir en nuestro país, tanto por parte del Magrama como de los servicios estadísticos de las CCAA que adolecen, bien de una falta de medios o bien de la intención a la hora de dotar de transparencia a un mercado fundamental en el tejido socioeconómico de amplias zonas en nuestro país», recuerda la organización.