«Venimos a anunciar el fin del cepo cambiario en la Argentina», dijo el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay en el inicio de la rueda de prensa.

Además, informó que «en estos momentos el directorio del Banco Central está en una reunión» para terminar definir los lineamientos correspondientes y que su objetivo es «reordenar la economía».

Prat Gay(Foto: Nicolás Stulberg)

Según la agencia Telam, el ministro anunció la creación de un «tipo de cambio único» tras la liberación del cepo cambiario y un límite de USD 2 M para atesoramiento por persona jurídica o persona física.

Prat Gay remarcó que se «volverá a la situación regulatoria en materia cambiaria antes de la instauración del cepo en noviembre de 2011».

Y agregó que el Gobierno trabaja en varias vías de financiamiento para levantar el cepo cambiario y que le permitirá contar con nuevos fondos de entre USD 15.000 y USD 25.000 M durante las próximas cuatro semanas, lo que reforzará las reservas del Banco Central.

Y precisó que las vías de financiamiento incluyen las negociaciones con bancos extranjeros, las cerealeras, empresas argentinas y el Banco Central de la República Popular de China.

Anunció también que «a todo aquel que haya tenido ganancias se le va a retener el 35% el mismo día que percibe esa ganancia» en el caso de los contratos pactados a futuro durante los últimos meses.

El ministro ponderó que la percepción de la AFIP será un «ingreso directo a la tesorería de la Nación». Y definió como «bola de nieve» de la administración anterior los USD 17.000 M en contratos de dólar futuro, a los que definió como «dólares que no existían y que esta administración va a tener que pagar».

Al explicar las medidas para levantar el cepo cambiario, precisó que el encaje para el ingreso de divisas será de cero y “no va a tener la penalización del 30%”.

Dijo que también “desaparecen las normas de la AFIP que traían cambios múltiples” a través del la retención del 35% como adelanto de Ganancias.

“Desaparece el dólar tarjeta, el dólar turismo”, agregó Prat Gay, aunque aclaró que los pagos en efectivo van a tener una retención del 5% “para dar ventaja al que esta bancarizado”.